Kokopelli es conocido como dios de la fertilidad usualmente
representada como un flautista Jorobado (a menudo con un enorme falo y plumas,
o protuberancias en su cabeza parecidas a antenas) en la mitología de los
americanos nativos del suroeste de Estados Unidos.
Él ha sido venerado por
algunas culturas nativo americanas en el suroeste de los Estados Unidos. Como
la mayor parte de las deidades de la fertilidad, Kokopelli preside sobre el
nacimiento de niños y la agricultura. Él es también un dios embaucador y
representa el espíritu de la música. Kokopelli es además un antiguo dios de los
indios Hopi de la fertilidad y la comunicación poderosa.
Según el mito Hopi, Kokopelli lleva en sus espaldas a los
niños y los distribuye entre las mujeres. A menudo participa en los rituales
del matrimonio, y Kokopelli se representa a sí misma como una consorte, una mujer
a la que se le llama Kokopelli-Mana en el mito Hopi.
También en muchos pueblos se cree que este dios es un juglar
errante, con un saco de canciones en la espalda. De acuerdo con las leyendas de
los navajos, es el dios de la cosecha y de la abundancia, y se cree que de su
saco salieron el arcoíris y las semillas.
Aunque sus auténticos orígenes son desconocidos, este
flautista y viajero «casanova» es una figura sagrada para muchos nativos del
sudoeste norteamericano. Su figura jorobada ha sido encontrada en pinturas y
grabados en muros de roca y cantos rodados por todo el sudoeste norteamericano.
Hay muchos mitos sobre el famoso Kokopelli. Uno de los
cuales es que viajaba de aldea en aldea trayendo el cambio de invierno a
primavera, derritiendo las nieves y trayendo la lluvia para propiciar las
cosechas. Se dice también que la joroba de su espalda representaba los sacos de
semillas y las canciones que portaba.
La leyenda también cuenta que el sonido de su flauta
simbolizaba el paso del invierno a la primavera. Se decía que la flauta de
Kokopelli se podía escuchar en la brisa de primavera, mientras entraba la
calidez estival.
También se cuenta que Kokopelli era la fuente de la
concepción humana. La leyenda dice que todo el mundo bailaría y cantaría
durante toda la noche cuando escucharan la flauta de Kokopelli.
A la mañana siguiente incluso las doncellas estarían
embarazadas.
Cualquiera que sea el verdadero significado de Kokopelli, ha
sido fuente de inspiración musical y danza, y ha repartido alegría a los que le
rodeaban. Incluso hoy, Kokopelli, con su joroba y su flauta, es siempre
bienvenido en las casas de los nativos americanos.
Leyendas de Kokopelli